Ayer hablábamos de las cosas que podíamos hacer para cambiar a los demás, y llegamos a la conclusión de que no podíamos hacer nada. Hoy vamos a ver qué hace que una persona quiera cambiar.
El dolor. Cuando uno ha sufrido bastante y te has dado muchas veces contra la pared, cuando física o emocionalmente has tocado fondo, llega un momento en que quieres cambiar.
El descontento. Cuando llegas a pensar que en la vida ha de haber más que esto.
La tercera y última (puede haber más) es el saber que puedes cambiar, que quieres mejorar y evolucionar positivamente.
12 de febrero de 2012, 20:27
Hola, es la primera vez que visito tu blog. Me encantan. Escribes cosas que sabemos pero deben hacer que nos la recuerden. Gracias por compartir
12 de febrero de 2012, 20:38
Gracias a ti por leerme. Intento escribir vivencias mías, que imagino les ocurren a muchas personas, además tienes toda la razón, son cosas que sabemos pero cuando las volvemos a leer parecen nuevas. Saludos de Víctor